¿Son las siliconas malas para el cabello? Descubre para qué valen las siliconas en los productos del pelo
¿Alguna vez has leído una etiqueta y te has quedado pensando si ese “-cone” al final de los ingredientes era bueno o malo para tu pelo?
Las siliconas generan muchas dudas: unas personas dicen que lo arruinan, otras que lo dejan suave y brillante. Pero, ¿qué hay de cierto en todo esto?
Quédate, porque en esta guía te voy a explicar para qué valen las siliconas en los productos del pelo, cómo funcionan, qué tipos existen y si realmente son un enemigo o un aliado de tu melena.
La respuesta te va a sorprender.
Qué son exactamente las siliconas
Las siliconas son compuestos derivados del silicio, un elemento natural que se combina con oxígeno, hidrógeno y carbono para crear una estructura flexible, resistente y estable.
Se utilizan en cosmética capilar desde hace décadas porque forman una película protectora alrededor del cabello, ayudando a que se vea más liso, suave y brillante.
En palabras simples: las siliconas son como un “abrigo” invisible que protege tu pelo del calor, la humedad y la fricción.
No son aceites ni ceras, aunque a veces se confunden con ellos. Su principal función es mejorar la apariencia y el tacto del cabello, además de facilitar el peinado.
Para qué valen las siliconas en los productos del pelo
Esta es la gran pregunta.
Las siliconas sirven, sobre todo, para embellecer el cabello y protegerlo.
Su acción se nota de inmediato: el pelo se siente más sedoso, brilla más y se enreda menos. Pero hay más detrás de ese efecto. Aquí tienes las principales funciones de las siliconas en cosmética capilar:
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Sellar la cutícula del cabello.
Cada hebra de pelo tiene una capa externa llamada cutícula. Cuando está abierta o dañada, el cabello se ve áspero y sin brillo.Las siliconas la cubren y sellan, haciendo que refleje mejor la luz y se sienta más suave.
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Proteger del calor.
Si usas secador, plancha o rizador, las siliconas crean una barrera que ayuda a reducir los daños por altas temperaturas. -
Evitar el encrespamiento.
Al formar una película protectora, impiden que la humedad del ambiente penetre en el cabello. Esto mantiene el alisado o las ondas más controladas. -
Dar brillo inmediato.
Las siliconas reflejan la luz, lo que crea ese efecto de cabello brillante y pulido que muchas personas buscan. -
Facilitar el desenredado.
La película que generan reduce la fricción entre los cabellos, haciendo más fácil el cepillado y evitando roturas. -
Prolongar el color en cabellos teñidos.
Algunas siliconas ayudan a sellar el pigmento dentro de la fibra capilar, haciendo que el color dure más tiempo.
En resumen, la función de las siliconas en el pelo es proteger, suavizar y mejorar la apariencia del cabello de forma instantánea.
Por eso se encuentran en champús, acondicionadores, mascarillas y sobre todo, en productos de peinado como serums o protectores térmicos.
Tipos de siliconas y cómo diferenciarlas
No todas las siliconas son iguales. Algunas se eliminan fácilmente con el lavado, y otras se acumulan con el tiempo.
Conocer la diferencia es clave para saber si te convienen o no.
Siliconas solubles en agua
Son las más ligeras y fáciles de eliminar. No dejan residuos y no tapan el cuero cabelludo.
Son ideales para quienes lavan su cabello con champús suaves o sin sulfatos.
Algunos ejemplos son:
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Dimethicone copolyol
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PEG-8 dimethicone
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Lauryl methicone copolyol
Estas siliconas dan brillo y suavidad sin apelmazar. Si tu cabello es fino o graso, este tipo es el más recomendable.
Siliconas no solubles en agua
Estas son más resistentes. No se eliminan fácilmente con un champú suave y, con el tiempo, pueden acumularse si no se retiran bien.
Ejemplos:
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Dimethicone
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Cyclopentasiloxane
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Amodimethicone
Estas siliconas ofrecen una protección intensa, especialmente frente al calor y la humedad. Son ideales para cabellos secos, dañados o castigados por tintes o planchas.
Siliconas volátiles
Tienen una textura muy ligera y se evaporan con el tiempo, dejando el cabello suave sin residuos.
Se usan mucho en productos de peinado, sobre todo en serums y sprays.
Ejemplo típico: Cyclomethicone.
Siliconas en los productos de peinado
En los productos de peinado, las siliconas cumplen un papel fundamental.
Su función es controlar, definir y proteger el cabello frente a factores externos.
Los productos de peinado con siliconas ayudan a:
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Controlar el frizz durante todo el día.
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Aportar brillo sin sensación grasa.
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Sellar las puntas abiertas temporalmente.
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Proteger del calor de las herramientas térmicas.
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Facilitar el moldeado, alisado o definición de rizos.
Por eso los encuentras en serums, aceites capilares, protectores térmicos y cremas de peinado.
En este tipo de productos, las siliconas son especialmente útiles para quienes buscan un acabado pulido o un cabello más manejable.
Siliconas en el champú: ¿sí o no?
Las siliconas en el champú generan más controversia.
Algunas personas prefieren evitarlas porque sienten que “ensucian” o “asfixian” el cabello, pero no siempre es así.
En los champús, las siliconas suelen estar en cantidades pequeñas y su función es suavizar la fibra capilar durante el lavado para que no se enrede ni se rompa.
No son dañinas en sí mismas, pero si se usan constantemente sin limpiar bien el cabello, pueden acumularse y restarle volumen o brillo con el tiempo.
Si usas un champú con siliconas, asegúrate de:
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Alternarlo con otro sin siliconas ni sulfatos, para limpiar bien los residuos.
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Evitar abusar de productos que también las contengan, para no saturar el pelo.
¿Son malas las siliconas para el cabello?
Depende del tipo de cabello, de la cantidad de producto y de la frecuencia con la que las uses.
Las siliconas no son malas, pero sí pueden volverse un problema si se acumulan o si no eliges las adecuadas.
No penetran en la fibra capilar, simplemente se adhieren a su superficie. Eso significa que no nutren el cabello, pero tampoco lo dañan directamente.
El problema aparece cuando hay exceso de capas de silicona que impiden que otros ingredientes (como aceites o proteínas) penetren. Entonces el pelo se siente suave al tacto, pero en realidad está seco por dentro.
Si tu cabello es seco, dañado o usas mucho calor, las siliconas pueden ser tus aliadas.
Si tu cabello es fino, graso o buscas una rutina más natural, quizás te conviene reducirlas o usar solo las solubles.
Cómo saber si un producto tiene siliconas
Solo tienes que leer la etiqueta de ingredientes (INCI).
Las siliconas suelen terminar en -cone, -conol, -siloxane o -silicate.
Por ejemplo: Dimethicone, Cyclopentasiloxane, Amodimethicone, Trimethylsiloxysilicate.
Si ves alguno de estos nombres, el producto contiene siliconas.
Si quieres evitarlas, busca etiquetas que digan “silicone free” o “sin siliconas”.
Cuándo conviene usarlas
Las siliconas no son malas, simplemente hay que saber cuándo usarlas y cómo.
Estos son los casos en los que sí aportan beneficios reales:
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Antes de usar herramientas térmicas.
Las siliconas protegen del calor del secador, plancha o rizador. -
Después del lavado, en puntas abiertas o cabellos secos.
Ayudan a sellar la cutícula y mejorar el aspecto de las puntas. -
En ambientes húmedos o con frizz.
Crean una barrera contra la humedad, evitando que el cabello se encrespe. -
Para dar brillo inmediato antes de un evento.
Un toque de serum con silicona deja el cabello luminoso y suave.
Cuándo es mejor evitarlas
Hay situaciones en las que es mejor limitar o evitar su uso:
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Si usas método curly o sigues una rutina sin sulfatos.
Algunas siliconas no solubles no se eliminan bien y pueden apelmazar el rizo. -
Si tu cabello es muy fino o se engrasa rápido.
Las siliconas pesadas pueden restar volumen. -
Si buscas una rutina completamente natural.
Las siliconas no aportan nutrientes, por lo que los tratamientos naturales pueden ser una mejor opción.
Cómo eliminar el exceso de siliconas
Si notas que tu cabello está apagado, pesado o sin volumen, puede que haya una acumulación de siliconas.
La solución es sencilla: usa un champú clarificante una o dos veces al mes.
Estos champús contienen tensioactivos que limpian en profundidad y eliminan residuos acumulados.
Después, aplica una mascarilla nutritiva sin siliconas para rehidratar la fibra capilar.
De esta forma, el cabello recupera su ligereza y brillo natural.
Alternativas a las siliconas
Si prefieres productos sin siliconas, hay opciones naturales que cumplen funciones similares:
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Aceite de argán: aporta brillo y suavidad.
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Aceite de coco: protege la fibra capilar y reduce la pérdida de proteínas.
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Proteínas vegetales: reparan la estructura interna del cabello.
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Extracto de lino o aloe vera: controlan el frizz y aportan hidratación.
Estas alternativas no forman una película tan resistente como las siliconas, pero nutren el cabello desde el interior y lo dejan más saludable a largo plazo.
Mitos y verdades sobre las siliconas
Mito 1: “Las siliconas dañan el cabello.”
Falso. No lo dañan, solo lo recubren. Si se usan correctamente, protegen del calor y la humedad.
Mito 2: “No dejan que el pelo respire.”
El cabello no “respira”, ya que es una fibra muerta. Las siliconas solo afectan a la superficie, no al crecimiento.
Mito 3: “Son todas iguales.”
No. Hay siliconas solubles, volátiles y pesadas. Cada una tiene un uso distinto.
Mito 4: “Dejan el pelo graso.”
Solo si se abusa de ellas o si se eligen siliconas muy densas para cabellos finos.
La clave: equilibrio y conocimiento
Las siliconas no son ni buenas ni malas.
Son una herramienta más en el cuidado capilar. Todo depende de cómo las uses y de las necesidades de tu cabello.
Usadas con moderación y en los productos adecuados, pueden mejorar notablemente el aspecto del cabello.
Pero si se convierten en la base de tu rutina, pueden ocultar un daño que necesita reparación real.
Por eso, lo ideal es encontrar un equilibrio: combinar productos con siliconas para protección y acabado, y otros sin siliconas para nutrir en profundidad.
De esta forma, tu cabello lucirá bonito por fuera y estará sano por dentro.
Conclusión
Las siliconas han sido injustamente demonizadas.
Su función es mejorar la apariencia, suavizar y proteger. No dañan el cabello, pero tampoco lo reparan.
La clave está en saber para qué valen las siliconas en los productos del pelo, qué tipo contiene tu cosmético y cómo equilibrar su uso según tus necesidades.
Si las usas con inteligencia, te ayudarán a conseguir un cabello más brillante, manejable y protegido frente al calor y la humedad.
El secreto está en conocer tu tipo de pelo y ajustar tu rutina en consecuencia.





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